Ksawery Pruszyński nació en diciembre de 1907 en la región de Volinia (actual Ucrania), hijo de una familia terrateniente polaca que años después se asentó en Cracovia tras la Revolución Rusa. Estudió Derecho en la Universidad Jaguelónica, donde comenzó a destacar por su inteligencia y su pasión por el análisis político y social. Inició su carrera periodística en la revista Czas, y pocos años después emprendió su labor como reportero internacional, viajando a lugares tan diversos como Sarajevo, Shanghái o la Palestina del Mandato.
Durante la Guerra Civil Española, se unió al bando republicano como corresponsal en Madrid, tendencia que continuó en su compromiso contra los totalitarismos. Con el estallido de la Segunda Guerra Mundial se integró en el ejército polaco en el exilio, combatiendo en Narvik (Noruega) y Falaise (Francia), mientras simultáneamente seguía publicando reportajes. En la posguerra, se incorporó al cuerpo diplomático de Polonia, participando en misiones en Washington, en la ONU y finalmente como embajador en los Países Bajos. Además, desempeñó un papel clave en la creación del Centro de Documentación Judía en Francia, un paso fundamental para la memoria histórica del Holocausto.
En su haber literario destacan obras como Polish Invasion, Russian Year y una serie de reportajes sobre España, Palestina y Polonia. En junio de 1950, falleció en un controvertido accidente de coche en Alemania, con apenas 42 años. Su figura queda como símbolo de un periodista y diplomático comprometido con la verdad, la justicia y los valores democráticos, además de uno de los precursores del reportaje moderno en Polonia.