C. G. Crump, nacido en Dorset en 1862 y fallecido en Londres en 1935, fue un historiador y archivero británico que dedicó gran parte de su vida al estudio riguroso de las fuentes históricas y a la reflexión sobre el método historiográfico. Graduado en Oxford, trabajó en el Public Record Office, donde desarrolló una profunda comprensión de la documentación como pilar del conocimiento histórico. Su obra destaca por su enfoque en la lógica de la historia, la imparcialidad en la investigación y la necesidad de una mente inquisitiva para abordar el pasado. Es autor de ensayos fundamentales sobre teoría de la historia y también incursionó en la ficción con una novela satírica de tono académico que revelaba su versatilidad intelectual. Fue editor de textos clásicos y mostró siempre una clara vocación pedagógica, convencido de que la historia debía ser una herramienta de comprensión más que una simple acumulación de datos. Su estilo sobrio y analítico sigue siendo una referencia para los estudiosos del pensamiento histórico.