Francisco de Quevedo y Villegas, nacido en Madrid el 14 de septiembre de 1580 y fallecido en Villanueva de los Infantes el 8 de septiembre de 1645, es uno de los escritores más destacados del Siglo de Oro español y figura señera del conceptismo. De origen hidalgo y educación jesuita en Alcalá y Valladolid, desarrolló una inteligencia temprana y un profundo dominio del castellano. Poeta mordaz y agudo satírico, cultivó múltiples géneros: poesía amorosa, moral, religiosa; novela picaresca con La vida del Buscón; prosa filosófica con Sueños y discursos, y escritos políticos y epistolares.
Su estilo se asienta en la agudeza verbal, la ironía y los juegos de ingenio, enfrentándose con agudeza a las vanidades cortesanas y políticos de su época. Celebrado por su habilidad lingüística y su mirada crítica del mundo moderno, su legado perdura como ejemplo de precisión estilística y fuerza intelectual.