Harold Robbins, nacido en Nueva York en 1916 y fallecido en 1997, fue uno de los autores más vendidos del siglo XX, con millones de ejemplares distribuidos en todo el mundo. Su vida estuvo marcada por la exageración y la autopromoción, lo que alimentó su imagen de autor atrevido y provocador. Antes de dedicarse a la escritura, trabajó en la industria cinematográfica, experiencia que le sirvió de inspiración para muchas de sus historias.
Debutó con fuerza en la novela gracias a Nunca ames a un extraño, y desde entonces publicó una larga lista de títulos que mezclaban sexo, ambición, lujo y poder, como El mercader de sueños o Los insaciables. Su estilo era directo, ágil y cargado de dramatismo, y aunque fue criticado por su enfoque comercial, su capacidad para conectar con el lector lo convirtió en un fenómeno editorial que definió una época.