Jeffrey Howard Archer, nacido el 15 de abril de 1940 en Londres, es una figura tan intrigante como prolífica: abogado, político—fue miembro del Parlamento británico y más tarde loable en la Cámara de los Lores—y, sobre todo, un autor de éxito mundial. Su carrera literaria despegó tras caer en dificultades financieras, cuando escribió Ni un centavo más, ni un centavo menos, obra que le devolvió esperanza y dio paso a una saga de novelas trepidantes.

Su verdadero salto lo logró en 1979 con Kane y Abel, un best‑seller que vendió más de treinta millones de ejemplares, convirtiéndolo en un nombre famoso en todo el mundo. Desde entonces ha vendido más de 300 millones de libros, incluyendo obras destacadas como La hija pródiga, Primero entre iguales y la serie “Crónicas Clifton”, así como la saga del detective William Warwick. Su estilo combina intriga meticulosa, estructuras muy elaboradas y una narrativa clara que engancha al lector desde la primera página.

La vida de Archer también estuvo marcada por la controversia: se vio involucrado en escándalos financieros y políticos, y sufrió una condena en 2001 por perjurio, lo que marcó un antes y un después en su trayectoria personal. Tras cumplir parte de la pena, regresó a la escritura con más determinación, publicando memorias de su experiencia en prisión y volviendo al bestseller con novelas policiacas inteligentes y emocionantes.

Hoy, ya apartándose de la arena política, sigue escribiendo cada otoño desde Mallorca o Londres, alternando la comodidad de su vida rural con un ritmo creativo disciplinado. Con su copiosa obra y su carácter resiliente, Archer ha demostrado que, incluso tras las mayores caídas, la palabra puede volver a levantar imperios.