John Tiffany, nacido en Huddersfield alrededor de 1971, es un director de teatro británico conocido por su estilo innovador, emocionalmente intenso y visualmente poético. Se formó en la Universidad de Glasgow, donde inicialmente estudió Biología antes de decantarse por Clásicas y Drama, lo que marcaría el rumbo de su carrera. Comenzó trabajando en el Traverse Theatre de Edimburgo, y posteriormente asumió roles de dirección en compañías como Paines Plough y el National Theatre of Scotland, donde consolidó su talento como creador escénico.
Su salto a la fama llegó con Black Watch, una poderosa obra sobre soldados escoceses en Irak que combinaba texto, movimiento y música de forma excepcional. Desde entonces, ha dirigido montajes tan diversos como Macbeth, Peter Pan, Let the Right One In y el musical Once, con el que triunfó en Broadway. Pero su proyecto más icónico fue Harry Potter and the Cursed Child, donde ejerció como director y cocreador, dando vida escénica al universo mágico con un enfoque teatral espectacular que conquistó a crítica y público.
Tiffany se caracteriza por su sensibilidad hacia los detalles emocionales, su capacidad para integrar lo simbólico con lo narrativo y una visión estética que desafía los límites convencionales del teatro. Ha trabajado a ambos lados del Atlántico, alternando grandes producciones con proyectos más experimentales, y es considerado una de las figuras más influyentes del teatro contemporáneo anglosajón. Su obra sigue siendo referencia obligada en el diálogo entre tradición y vanguardia.